Según una nueva normativa, los dispositivos ahora se disparan a una velocidad menor, reduciendo el margen de tolerancia permitido. Esta medida forma parte de un esfuerzo integral para reducir el número de accidentes en carreteras y promover una conducción más segura.
Nuevo margen de tolerancia:
Hasta ahora, la DGT aplicaba un margen de error en los radares de 7 km/h para velocidades de hasta 100 km/h y de 7% para velocidades superiores, lo que permitía a los conductores superar ligeramente el límite sin recibir sanciones. Sin embargo, con los cambios recientes, estos márgenes se han reducido, especialmente en los radares configurados para 120 km/h.
En este sentido, un radar que antes se disparaba aproximadamente a 128 km/h, ahora se activará cerca de los 124 km/h, endureciendo el control en las autopistas y autovías. Esta reducción busca frenar el exceso de velocidad, una de las principales causas de accidentes graves en el país. Según la DGT, esta modificación permitirá que los conductores respeten mejor los límites y reduzcan los riesgos en la carretera.